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El diseno como destino

1 Agosto 2024
LA FONTE

Diseno Interior

Franco Moschini, artífice de Poltrona Frau es el impulsor del Interno Marche, un hotel dedicado al diseño en la Villa Gabrielli de Tolentino, antigua factoría de la empresa.

Franco Moschini, artífice de Poltrona Frau es el impulsor del Interno Marche, un hotel dedicado al diseño en la Villa Gabrielli de Tolentino, antigua factoría de la empresa.

Hay hoteles y hoteles. La mayor parte de ellos sólo tiene la intención de albergar más o menos decentemente a los huéspedes, mientras que un número no muy nutrido apunta a más altas aspiraciones. Y el recién inaugurado Interno Marche pertenece a esta segunda categoría, aquellos que se distinguen por sus peculiaridades, en este caso, por su singular historia y por un esmerado diseño que lo hacen cercano a la idea de un pequeño museo habitable, convirtiendo la estancia en toda una experiencia cultural, sensorial y estética. El hotel se inauguró el pasado mes de junio, coincidiendo con el 90 cumpleaños de su promotor, una figura indispensable en la historia del diseño italiano de calidad, con una trayectoria por la que en 2016 le fue concedido el Compasso d’Oro. Se trata de Franco Moschini, un emprendedor con una historia fascinante que ha querido dejar su huella con este proyecto, ambicioso en su belleza y generosidad, como un legado para la ciudad de Tolentino, en el valle del Chianti, en la bella región italiana de Marche en la que está situada.

Moschini se casó en los años sesenta con Isabella Brandi, una de las nietas herederas de Nazareno Gabrielli, fundador de la empresa de moda y pequeños objetos de cuero del mismo nombre. Un tiempo después, su suegro le pidió que viajase a Turín para evaluar la situación de la empresa Poltrona Frau, que en aquel momento estaba sumida en graves problemas económicos y tenía además una gran deuda con una empresa de curtiduría perteneciente a la familia Brandi.

Al ver el potencial de esa marca, Moschini decidi6 comprarla y en 1962 traslada la producción a Tolentino (aunque manteniendo la dirección legai en Turin), donde tenia su base Nazareno Gabrielli, una zona de la Italia centrai conocida especialmente por la industria del cuero, muy apropiada para la marca Poltrona Frau, que se dedicaba a los muebles tapizados en piel. Bajo su dirección, Poltrona Frau se convirtió en una marca lider del mundo del mobiliario a partir de la visi6n de Moschini, que vio en seguida la importancia de colaborar con algunos de los mejores disenadores de cada momento, entre ellos, Gio Ponti, Gae Aulenti (que también llevó a cabo el proyecto de su casa de campo), Ferdinand Porsche, Michele De Lucchi, Jean-Marie Massaud, Nendo, Piero Lissoni o Neri&Hu. El lugar en el que se asentó Poltrona Frau tue el mismo que habia sido el cuartel generai de la marca Nazareno Gabrielli: la Villa Gabrielli, un gran edificio art nouveau construido en 1922, segùn el diseno de Stefano Gentiloni Silverj, con una extensión de 3.600 m2 que albergaba toda la producción de la marca, desde sus catalogos hasta bolsos, billeteras, objetos de despacho, panuelos, cojines, etc. En ese lugar se estableció después Poltrona Frau y ahora, los arquitectos de ORA Studio lo han reconvertido en hotel de 25 habitaciones, cada una de ellas homenajeando a un disenador diferente, y cinco suites que rememoran los grandes movimientos estilisticos del siglo XX. El hotel ademas consta de restaurante, bar, gimnasio, spa y un espacio multifuncional que acomoda a unas cincuenta personas. El espléndido jardin de 1.600 m2, donde reinan pinos y cipreses, completa este enclave con vistas sobre la ciudad de Tolentino.

El proyecto es el legado a la ciudad de Tolentino de un gran impulsar del diseno italiano, un homenaje al talento creador e innovador del Made in Jtaly.

El hotel cuenta con 25 habitaciones, cada una en homenaje a un disenador diferente, y cinco suites que rememoran los movimientos estilfs ticos del siglo xx.

Para este proyecto se ha llevado a cabo una costosa y meticulosa rehabilitación que ha durado tres años y que incluye muchos detalles, corno la recuperación de los frescos originales o la integración de la antiguas tinas destinadas al teñido de las pieles. Màs de dos mii profesionales, entre arquitectos, ingenieros, interioristas, restauradores, geólogos, agrónomos, etc., han intervenido en esta transformación. El edificio centrai se distribuye en tres niveles: en la entreplanta està la zona de recepción, la sala para desayunos y el lounge bar, mientras que el restaurante, el spa y el gimnasio se alojan en la pianta baja, con acceso directo a los extensos jardines. Las habitaciones se distribuyen en varias alturas. En la puerta de cada una de ellas figura el nombre del disefiador a quien va dedicada y alli mismo se encuentra un còdigo QR que se puede escanear para tener toda la informaci6n sobre el autor en cuesti6n y su obra, con documentos y materiai fotogràfico, una herramienta didàctica que ayudarà a los visitantes a conocer mejor las razones y el contexto hist6rico en el que se disefiaron losmuebles y objetos con los que van a convivir. A estos tres niveles se anade una torreta en la que està la elocuente inscripciòn latina de la obra De rerum natura, del poeta romano Lucrecio: “Ex nihilo nihil” (“Nada viene de la nada”), una leyenda muy acorde con la filosofia de este proyecto. Es en la misma torreta donde se encuentra la suite presidencial dedicada a Franco Moschini, un remanso de paz para la que él mismo ha seleccionado todo el mobiliario, con piezas corno la estanteria Ve/aria de Franco Alibini, editada por Cassina, o la butaca Vanity Fair, simbolo de Poltrona Frau, en cuero rojo.

Para explicar las màs de cuatrocientas piezas que conforman el contenido de las habitaciones es necesario aclarar que en 2003 el fondo de capitai privado Charme, liderado por Luca y Matteo Cordero de Montezemolo, comprò parte de Poltrona Frau con la idea de formar un grupo representativo de la excelencia made in ltaly. Asi, el Grupo Poltrona Frau adquiriò parte de Gebrüder Thonet Vienna, Gufram, Zanotta, Cassina y Cappellini. Se convirtiò en un grupo muy potente que en 2014 fue adquirido a su vez por la compania americana Haworth, a excepciòn de la marca Gebrüder Thonet Vienna, que sigue perteneciendo al holding Moschini S.p.a. Es por elio que gran cantidad de muebles y objetos que figuran en el hotel provienen de las colecciones de estas marcas, tanto en las cinco suites -que se inspiran en movimientos de la arquitectura y diseno del siglo XX, corno el Arts&Crafts, la Secesiòn Vienesa, el Movimiento Moderno, el Radical y el Pop- corno en las habitaciones que recrean la visiòn de distintos disenadores. Muchos de ellos son ampliamente conocidos por el gran publico, pero es de agradecer que en esta selecciòn figuren nombres corno Tito Agnoli, Luca Scacchetti o Luigi Massoni, que no han recibido tanto aplauso, peroque fueron muy grandes en su dia, con innumerables contribuciones a la historia del diseiio y cuyos nombres se deben reivindicar. Pocas mujeres forman parte de este elenco, aparte de la maestra Gae Aulenti, las integrantes de Front y de los dùos Neri&Hu, Lella y Massimo Vignelli o GamFratesi. Es una asignatura pendiente para el diseiio que las mujeres ganen en protagonismo. A los maestros de la talla de Vico Magistretti, Gio Ponti, Franco Albini, Marco Zanuso o Achille Castigliani nadie les va a poner un pero, corno tampoco a Michele de Lucchi, nendo, Cappellini, Piero Lissoni, Mare Newson, Pierluigi Cerri, Mario Bellini, Michael Anastassiades, Roberto Lazzeroni o Jean-Marie Massaud, todos ellos autores de sabra consolidados y admirados por su creatividad e innovaciòn en el panorama del diseiio contemporaneo.

A quien le hayan entrado ganas de visitar el hotel, conocer la zona y saber màs de su historia, cultura, gastronomia y viiiedos, les recomendamos que lean el libro Vida de un impreditore del bello (“Vida de un emprendedor de lo bello”), escrito por Francesco y Giulio Alberoni, que habla de Franco Moschini, su relaciòn con el lugar donde reside, donde creò el Museo de Poltrona Frau (obra de Michele de Lucchi) y donde està la sede de sus dos fundaciones culturales: la Fundaciòn Moschini y Design Terrae. En el libro comparte sus lugares favoritos en la zona, desde la casa del poeta Leopardi, el castillo de Monterado, el santuario de Santa Maria delle Stelle o la Riviera de Conero. Unas buenas excursiones que hacen de contrapunto al interior de un hotel que celebra a aquéllos que apostaron por el futuro y se expresaron de los modos màs diversos de acuerdo con su visiòn personal, pero también dependiendo de las nuevas tecnologias y materiales con los que contaban en cada momento en que los concebian. – ADS internomarche.it